Las autoridades sanitarias de Arabia Saudí han confirmado ocho nuevos casos de personas infectadas por el coronavirus causante del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS), que elevan ya a 102 el número total de afectados contabilizados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). De ellos, prácticamente la mitad han muerto.
Las autoridades sanitarias de Arabia Saudí han confirmado ocho nuevos casos de personas infectadas por el coronavirus causante del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS), que elevan ya a 102 el número total de afectados contabilizados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). De ellos, prácticamente la mitad han muerto.
Dos de los hombres eran de Riyad, quienes ya sufrían enfermedades crónicas, murieron, mientras que el resto de las víctimas permanecen en cuidados intensivos, según informa la OMS.
Además, una persona con un caso previamente confirmado en el laboratorio de los Emiratos Árabes Unidos ha muerto.
“A nivel global, desde septiembre del 2012 hasta ahora, la OMS ha informado de un total de 102 casos de infectados por MERS, incluyendo 49 muertes” ha declarado la OMS.
El nuevo coronavirus, que puede causar tos, fiebre y neumonía, surgió en Arabia Saudí el año pasado y ha sido detectado en personas en el Golfo Pérsico, Francia, Alemania, Italia, Túnez y Reino Unido.
Las investigaciones sobre este virus están tratando de conocer qué animales pueden estar favoreciendo este brote en humanos, de hecho un reciente estudio ha encontrado una fuerte evidencia de podría haberse extendido por culpa de los dromedarios en Oriente Medio, aunque también ha sido aislado en otros animales como los murciélagos.
La OMS, de momento, no ha recomendado establecer restricciones para viajar a estos países, pero las autoridades sanitarias han alertado de la importancia de mantener la vigilancia ante la aparición de nuevos casos. Han sido varios los casos de viajeros que tras volver de Oriente Medio han desarrollado infecciones respiratorias graves. Todos ellos deben realizarse pruebas para descartar la infección por el nuevo coronavirus.