Medicamentos, productos de aseo, cosméticos entre muchos otros, son sólo algunos de los elementos que los niños llevan a su boca desconociendo el peligro que puede significar la ingesta de productos altamente tóxicos para su organismo.
Ante una intoxicación en niños, adultos o animales, el Centro de Información Toxicológica de la Pontificia Universidad Católica (CITUC) brinda asistencia telefónica tanto para profesionales de la salud como para la comunidad, siendo el principal centro de referencia en el manejo del paciente intoxicado. El CITUC funciona los 365 días del año en horario continuo, recibiendo anualmente alrededor de 30.000 llamadas de todo el país.
Según los registros del CITUC la mayoría de las intoxicaciones son de carácter accidental siendo uno de los grupos principalmente afectados el de preescolares entre 1 año hasta 5 años de edad junto con el de adultos entre 20 y 75 años. Los principales productos causales son los medicamentos adjudicándose cerca de un 60% de las intoxicaciones, seguido por productos de uso doméstico con un 19%, los plaguicidas 6% y mordedura de animales 5%. Luego en menor proporción se registran intoxicaciones con productos cosméticos y con productos industriales. Cabe destacar que los medicamentos principalmente involucrados son aquellos de uso neurológico que incluyen fármacos antidepresivos, ansiolíticos y analgésicos. Dentro de las intoxicaciones con productos de aseo destacan las con limpiadores y blanqueadores/desinfectantes principalmente cloro.
Cuando las intoxicaciones son de carácter intencional destaca el uso de medicamentos registrándose ingestas peligrosas de clonazepam, amitriptilina, sertralina, carbamazepina y paracetamol principalmente. El peak de incidencia de dichas intoxicaciones se ha registrado en adolescentes del género femenino.
El Dr. Juan Carlos Ríos, actual director ejecutivo del CITUC, durante su participación en el XXXI Curso Vespertino Semanal de Enseñanza Continua de Pediatría Primaria y Ambulatoria impartido por Fudoc, recalcó los siguientes puntos acerca del manejo del niño intoxicado:
- Ante todo llamar al CITUC para recibir asistencia telefónica.
- No inducir el vómito, ya que esta maniobra aumenta el riesgo de aspiración y con ello de neumonitis química, por lo que está ampliamente desaconsejada.
En cuanto al manejo general, por parte del equipo de salud, el Dr. Ríos recalcó los siguientes aspectos:
- Siempre tratar al paciente y no al tóxico, siguiendo en primer lugar los principios básicos de reanimación.
- Luego seguir el ABC de las intoxicaciones: evitar la absorción del tóxico, favorecer la adsorción del tóxico, aumentar la eliminación del tóxico, y antagonizar el tóxico, en la medida de los recursos disponibles y situación particular.
- Para evitar la absorción del tóxico el lavado gástrico sigue siendo la medida más utilizada, pero no se recomienda de rutina y sólo estaría justificada ante una ingesta hace menos de 60 minutos de sustancias que provoquen riesgo vital y/o que sean altamente tóxicas, o en su defecto, desconocidas. También se justificaría ante la ingestión de tóxicos no susceptibles de ser adsorbidos por el carbón activado. El lavado gástrico estaría contraindicado en situaciones de ingesta de cáusticos.
- No olvidar la descontaminación de piel y mucosas cuando sea necesario, removiendo la ropa contaminada y lavando con abundante agua. En ningún caso se utilizan neutralizadores.
- Para favorecer la adsorción del tóxico se utiliza el carbón activado el cual es más efectivo si se utiliza antes de 60 minutos de la ingesta. Se puede dar a beber mezclado con jugo o mediante sonda. La dosis en niños hasta 12 años es de 1gr/Kg y en adultos entre 1-2gr/Kg. Se debe recordar que el etanol, metanol, fierro y litio son pobremente adsorbidos por el carbón activado.
- Para aumentar la eliminación del tóxico el forzar la diuresis ha demostrado tener poco efecto y la hemodiálisis se reserva sólo para casos específicos como en la intoxicación con litio.
- El carbón activado en múltiples dosis (0,5gr/kg cada 2-4 horas por 24-48hrs) ha demostrado ser particularmente útil para el tratamiento de intoxicaciones con ac. valproico, carbamazepina y digitálicos.
- Utilizar el antídoto específico en caso de encontrarse disponible. (ver Tabla 1)
Tabla 1 : Antídotos y sus principales usos
Edición: Constanza Leal
Imágenes: Archivos propios, Google
Fuente: Clase Intoxicaciones Fudoc 2012, Dr. Juan Carlos Ríos ; www.cituc.cl