¿Qué desató la epidemia de obesidad?

¿Qué desató la epidemia de obesidad en el mundo?

Brillante reflexion publicada en BBC Salud. Se complemneta con información científica.

En las últimas tres décadas las tasas de obesidad global se han duplicado y ahora viven en el mundo más de500 millones de personas obesas.

 ¿Qué desató la epidemia de obesidad en el mundo?

Brillante reflexion publicada en BBC Salud. Se complemneta con información científica.

 

En las últimas tres décadas las tasas de obesidad global se han duplicado y ahora viven en el mundo más de500 millones de personas obesas

 

Recordemos que los azucares simples son los  monosacáridos: glucosa, fructuosa y galactosa y que los disacáridos son la sacarosa o azúcar corriente y la lactosa llamada también el azúcar de la leche.

Pues bien, algunos científicos creen que hay algo en la fructosa que está causando adicción.

Consecuencias

Este exceso en el peso corporal está causando tres millones de muertes cada año, según cifras de la Organización Mundial de la Salud.

Pero ¿qué fue lo que causó está epidemia?

Sedentarismo:

Algunos culpan a nuestro estilo de vida, que nos ha vuelto cada vez más sedentarios, pasando horas sentados frente al computador o la televisión.

Pero otros expertos creen que los responsables son los alimentos que comemos. Y más específicamente, dicen, las enormes cantidades de azúcar que consumimos.

La genética no ha cambiado, todos somos potencialmente gordos.

“Genéticamente, los seres humanos no hemos cambiado, pero nuestro ambiente y nuestro acceso a la comida sí han cambiado”, explica a la BBC el profesor Jimmy Bell, especialista en obesidad del Imperial College de Londres.

El peso de la industria.

“Todos los días estamos siendo bombardeados por la industria alimentaria para que consumamos más comida”.

Deprime a cualquiera

“Es una guerra entre nuestro cuerpo y las demandas de nuestro organismo con el acceso a la comida que se tiene en una sociedad moderna. Y como científico me siento realmente deprimido, porque estamos perdiendo la batalla contra la obesidad” agrega.

Todo parte en los años 70

Uno de los más grandes cambios en nuestra dieta se remonta a los años 70, cuando la industria agrícola de Estados Unidos se embarcó en la producción masiva del maíz y del jarabe de maíz de alta fructosa, comúnmente utilizado hoy en todo el mundo como edulcorante en alimentos procesados.

Esto provocó un incremento masivo en las cantidades de alimentos baratos abastecidos a los supermercados estadounidenses: desde cereal hasta galletas de bajo precio.

Como resultado, las hamburguesas se hicieron más grandes y las papas fritas se hicieron más grasosas.

Esto, según la nutricionista, preparó el terreno para la epidemia de obesidad.

“El número de calorías producidas en Estados Unidos, y disponibles a los consumidores estadounidenses, se incrementó de 3.200 por persona en los años 70 a 3.900, casi el doble de lo que un individuo necesita”.

“Este incremento es enorme y pienso que es la causa de muchos problemas”, señala.

Edulcorante calórico rico en frutosa

En estos últimos años, basados en sencillos análisis de correlación, se le ha dado toda la importancia al jarabe de maíz de alta fructosa, un edulcorante calórico creado a partir del almidón o fécula de maíz empleado en bebidas, jugos y postres, como un potencia factor contribuyente a la obesidad especialmente infantil. Este se compone de fructosa y glucosa, los cuales están presentes en casi partes iguales y existen en EEUU dos formulaciones el HFCS 55 y el HFCS 42% de fructuosa.(muy utilizado en productos horneados)

La fructosa, un azúcar simple presente naturalmente en las frutas, exhibe diferencias importantes con su homologo –glucosa- tales como: favorecer la fabricación de grasa por el hígado, no estimular la secreción de dos hormonas-la insulina y leptina, ambas hormona saciógenas, y además no inhibir la secreción de Ghrelina, producto que le dice a nuestro cerebro que el estomago ya esta “ lleno” todo lo que se traduce finalmente en una mayor ingesta de alimentos que lo contienen, al no producir una saciedad adecuada, predisponiendo al desarrollo de obesidad y diabetes tipo 2

La diferencia fundamental con la glucosa es evidente: calorías con sabor, no actua sobre la insulina y la leptina .hormona que avisan al cerebro de la saciedad.

Estimulan al higado a producir grasas

No tiene efecto sobre otro producto la Ghrelina , quien nos dice que la capacidad gastrica esta completa.

Luego comida sin limites.