Un estudio de la Universidad de California en los Ángeles concluyó que fumar en los adolescentes y la juventud disminuye el grosor de la ínsula, una parte de la corteza cerebral que está involucrada con los sentimientos y juega un papel importante en la dependencia del tabaco.
Un estudio de la Universidad de California en los Ángeles concluyó que fumar en los adolescentes y la juventud disminuye el grosor de la ínsula, una parte de la corteza cerebral que está involucrada con los sentimientos y juega un papel importante en la dependencia del tabaco.
La investigación sugiere que estos cambios neurobiológicos se producen incluso cuando no se ha fumado durantre mucho tiempo, lo que expolicaría porque las personas que prueban el cigarrillo a unda edad temprana rapidamente sienten que podrán qeudar fisicamente enganchados durante toda su vida
Fuente: el mercurio